Los terroristas más emblematicos

El terrorismo individual es el ataque deliberado de una persona en contra de otras, utilizando métodos indirectos, como paquetes explosivos, autos y cartas bomba, o correspondencia contaminada con cepas virales. Estos individuos presentan desorden de personalidad y un alto grado de agresividad; en ocasiones, pueden padecer enfermedades psiquiátricas. Los terroristas individuales aducen motivaciones muy diversas, casi siempre actúan solos o se apoyan en cómplices, no están organizados y atacan blancos con valor simbólico.

El terrorismo grupal es efectuado por asociaciones civiles, guerrilleros o grupos armados de cualquier tendencia, por razones de índole política, social y/o religiosa. Siempre existe una motivación ideológica. Sus miembros persiguen un cambio drástico en un sistema establecido (p.ej. derrocar a un gobierno, obtener la independencia de un territorio, liberar presos políticos o derogar leyes). Por lo general, los grupos terroristas son el llamado brazo armado de asociaciones radicales (partidos políticos, organizaciones clandestinas, grupos separatistas, sociedades religiosas, guerrillas, etc.)

Los grupos terroristas se dividen en células, pequeños grupos conformados por tres a doce individuos, quienes no tienen contacto con otros, aunque pertenecen a la misma organización. Las células se encargan de perpetrar los denominados ataques o atentados. Los más comunes son: asesinatos selectivos contra personas emblemáticas del grupo o segmento al cual combaten (p.ej., un político, militar o policía de alto rango); ataques contra zonas concurridas (autos bomba en centros comerciales o calles principales, detonación de explosivos a bordo de aeronaves, suicidas que estallan causando alta mortandad, liberación de gases tóxicos); y secuestros contra individuos representativos (embajadores, líderes de opinión, políticos).

Pueden causar bajas entre la población civil de manera deliberada, o bien lanzar una advertencia para causar impacto social sin que existan lesionados (p.ej., advertir sobre la presencia de un paquete explosivo antes de que detone, para que este pueda ser desactivado a tiempo, logrando amplia cobertura mediática y la misma sensación de temor entre la población). Casi siempre, los ataques son adjudicados (cuando el mismo grupo asume públicamente la responsabilidad del atentado, o las autoridades determinan quiénes son los autores). Tras el ataque, el grupo da a conocer una proclama, en la cual se especifican los motivos del ataque, los fines que desean conseguirse (demandas) y se amenaza con efectuar nuevos atentados. Cuando una célula es capturada, existen otras que continúan su violenta lucha.



Dentro del terrorismo, destaca la vertiente aérea. Los aeroterroristas son individuos o grupos que cometen atentados criminales contra los pasajeros o tripulación de una aeronave o contra la aeronave misma, o que utilizan estos vehículos como armas para perpetrar ataques. El aeroterrorismo es practicado por grupos extremistas, narcotraficantes, paramilitares, milicias o comandos. Casi siempre va acompañado de amenazas de bomba, toma de rehenes y ejecución de personas a bordo de la aeronave. Por lo general, los explosivos se ocultan en el equipaje. Los aviones pueden ser secuestrados o atacados en el aeropuerto antes de su despegue; mientras vuelan (y en muchos casos son desviados a destinos diferentes al previsto en su ruta original); o al aterrizar. Otra modalidad es derribar aviones comerciales mediante bombas, misiles o sabotaje. También puede utilizarse para cometer magnicidios, cuando se sospecha que la víctima potencial viaja en el avión atacado. Otra variante es el ataque a los puestos de control, para causar confusión y que los aviones no puedan tener contacto con la torre, causando así accidentes. Una modalidad alterna es usar los aviones para estrellarlos contra objetivos específicos. La amplia cobertura mediática brindada a este tipo de atentados, provoca que los delincuentes recurran a ellos para obtener notoriedad y atraer la atención de la opinión pública y el gobierno.

El terrorismo internacional es usado por miembros de un grupo terrorista en contra de la población civil de otro estado o nación. Por lo general, es perpetrado por grupos fundamentalistas o extremistas, con la finalidad de dañar a los habitantes de un país considerado como enemigo político, económico, religioso o social, con el cual puede o no existir un conflicto bélico declarado. Los ataques de Al Qaeda en contra de Estados Unidos, Inglaterra y España en su propio suelo, son ejemplos de terrorismo internacional.



El terrorismo de Estado lo aplica el gobierno o las autoridades legales establecidas de una población, estado o país, en contra de sus propios ciudadanos, y dentro de sus propias fronteras. Los motivos casi siempre son políticos o de seguridad nacional. Implica la persecución, el secuestro, la tortura, la violación, el asesinato y la desaparición de disidentes políticos. También puede dirigirse contra grupos opositores, huelguistas, estudiantes o asociaciones religiosas. Entre casos famosos destacan los desaparecidos en las dictaduras sudamericanas del siglo XX, en países como Argentina, Chile, Nicaragua, El Salvador, Colombia, Perú y México.



El terrorismo delictivo o delincuencial es cometido por grupos criminales, por motivos económicos, luchas internas o conflictos territoriales. Va dirigido en contra de las autoridades; de integrantes de otros grupos delictivos; y a veces de la población civil. Sobre todo, es utilizado por narcotraficantes y cárteles de la droga, en cuyo caso se denomina narcoterrorismo. Durante las décadas de los ochenta y los noventa del siglo XX, el Cártel de Medellín en Colombia comete actos de terrorismo como volar aviones llenos de pasajeros, atentar con autos bomba contra edificios gubernamentales, asesinar a civiles, secuestrar y matar a personajes públicos y destruir el Palacio de Justicia, entre otros delitos, utilizando para ello a integrantes de grupos guerrilleros y terroristas de organizaciones como ETA.



Grupos terroristas muy conocidos son Al Qaeda (en Medio Oriente, Europa y Estados Unidos), Euskadi Ta Askatasuna o ETA (en España), Sendero Luminoso (en Perú), el Partido de Dios o Hezbolá (en Líbano), las Brigadas Rojas (en Italia) y el Ejército Republicano Irlandés, ERI o IRA (en Irlanda). Algunos activistas usan tácticas agresivas, sobre todo aquellos que actúan en defensa de la ecología o de los derechos de los animales, por lo cual los medios de información los catalogan como terroristas ambientales; sin embargo, esta utilización del término es incorrecta.

CASOS EMBLEMÁTICOS

George Metesky “El Bombardero Loco”

1940-1956, Nueva York (Estados Unidos): George Metesky “El Bombardero Loco” coloca 33 artefactos explosivos en teatros, terminales de autobuses, librerías y oficinas públicas, a lo largo de 16 años. Entre sus blancos se cuentan la Terminal Central, el Radio City Music Hall, la Biblioteca Pública de Nueva York, el edificio de la RCA y el metro. 22 de ellas explotan, causando un número indeterminado de muertos y heridos. Capturado en 1956, es recluido en una institución psiquiátrica. Muere allí en 1994, a los 90 años de edad.





Theodore J. Kaczynski “Unabomber”

1978-1995, (Estados Unidos): Theodore J. Kaczynski “Unabomber”, un profesor de ideas extremistas, envía 16 paquetes explosivos a universidades, aerolíneas y particulares, matando a 3 personas e hiriendo a 23. Su exigencia es que el periódico New York Times publique íntegro un manifiesto escrito por él, donde abordaba temas ambientales y de libertades individuales. Denunciado por su hermano, es capturado por el FBI y sentenciado a prisión perpetua.





Al Amin Khalifa Fhimah y Abdelbaset Ali Mohmed Al Megrahi


1988, Lockerbie (Escocia): Al Amin Khalifa Fhimah y Abdelbaset Ali Mohmed Al Megrahi, un agente de la inteligencia libia, atentan contra el vuelo 103 de Pan Am. El 21 de diciembre, el avión explota en el aire mientras vuela sobre una población escocesa, muriendo 270 personas de 21 países diferentes.





Ramsi Yousef

1994, Manila (Filipinas): Ramsi Yousef coloca una bomba en el vuelo 434 de la Philippine Airlines, el 11 de diciembre, matando a una persona e hiriendo a 10 más. Yousef ya había cometido un atentado contra el World Trade Center en Nueva York en 1993, utilizando otro artefacto explosivo.





Timothy McVeigh “El Bombardero de Oklahoma”

1995, Oklahoma City, Oklahoma (Estados Unidos): Timothy McVeigh “El Bombardero de Oklahoma”, un ex marine condecorado en la Guerra del Golfo Pérsico, vuela el Edificio Federal Alfred P. Murrah utilizando una camioneta cargada de explosivos. Mata a 168 personas, entre ellas 19 niños, y hiere a más de 500. Su motivo es la oposición al uso de la fuerza por parte del FBI y la ATF contra la población civil estadounidense. Sus cómplices, Terry Lynn Nichols y Michael Fortier, son condenados a varios años de prisión. McVeigh es juzgado y sentenciado a muerte. Se le ejecuta con una inyección letal en 2001, tres meses antes de los atentados terroristas del 11 de septiembre en Nueva York.





Mohamed Atta

2001, Nueva York (Estados Unidos): Mohamed Atta, Marwan al-Shehhi, Hani Hanjour y Ziad Jarrah, junto con otros 15 integrantes del grupo terrorista Al-Qaeda, secuestran los vuelos 11 y 77 de American Airlines, y 93 y 175 de United Airlines, tomando control de las aeronaves y estrellándolas contra diferentes objetivos: dos en las Torres Gemelas del World Trade Center, en Nueva York; una en el Pentágono, en Virginia; y otra más, que se dirige a Washington, la cual cae sobre Shanksville, Pensilvania. En estos atentados, ocurridos el 11 de septiembre, mueren 3,016 personas, y 35 edificios resultan destruidos. Al cráter resultante en Nueva York se le denomina “Zona Cero” (“Ground Zero”).


Fuente: Extraído del libro Monstruos entre nosotros. Historia y tipología de los asesinos, de Carlos Manuel Cruz Meza.


Via: EscritosConSangre