El asesino del Zodiaco

A comienzos de los 90, un episodio marcaría a Nueva York, dejándola en vilo durante muchisimo tiempo. Se lo llamó a este asesino "Zodiaco" (así se autodenominó). Al parecer mataba a cada persona por cada signo, cada 21 días.

Empezó por Escorpio, y siguió con Géminis, Tauro y Cáncer. Pero luego dejó de atacar. Se esfumó sin dejar rastros. Por fin, en 1996 y casi por casualidad, la policía pudo atraparlo. Se trataba de Heriberto Seda, que recién en 1998 fue encontrado culpable.

Los crímenes del asesino del Zodíaco fueron tan espeluznantes que los miembros del jurado de una corte de Queens se largaron a llorar cuando se leyó el veredicto contra Seda: culpable por tres muertes.

En realidad, aquel jamás había elegido a sus víctimas por el signo zodiacal. Simplemente las atacaba porque las veía vulnerables: enfermos mentales, discapacitados, marginales. Era, simplemente, gente indefensa.

Seda, de 30 años, hispano, se fascinó desde muy joven con las historias de asesinos múltiples, particularmente con uno que había rondado las calles de San Francisco en los años 60, el verdadero "Zodíaco". Así, cada vez que leía sobre estos temas, sus sueños se llenaban de sangre, muertes y se sentía identificado con el drama del asesino serial.

Sólo necesitaba hacer realidad esta fantasia. Y para eso necesitaba un nombre que invocara una promesa satánica: una cruz y un círculo.

Zodíaco hizo su entrada en escena en 1989, cuando le mandó a la policía una carta anunciando su reino de terror. Estaba firmada con una cruz, rodeada por un pequeño círculo y tres sietes invertidos: su marca inconfundible.

Sin embargo, recién el 8 de marzo de 1990 cometió su primer ataque: Mario Orozco, de 49 años, ciego de un ojo e inválido de una pierna. Seda no atacaba en toda la ciudad; se concentraba en la zona en la que vivía: la frontera entre los condados de Queens y Brooklyn, una de las zonas más marginales de Nueva York.

Sólo una vez se atrevió a aventurarse en Manhattan. Fue cuando le disparó a un vagabundo en el Central Park luego de preguntarle por su signo.

Cada vez que atacaba, Seda enviaba una carta al diario The New York Post, adjudicándose el crimen. En total, mató a tres personas y dejó heridas a otras seis.

Particularmente horroroso fue el asesinato de Patricia Fonti, una mujer a la que llevó hacia una zona oscura con la promesa de darle un cigarrillo. La apuñaló más de 100 veces. Luego de la autopsia, el cuerpo de Fonti fue incinerado. Nunca nadie reclamó sus cenizas.

Seda cayó preso casi por casualidad. En 1996, luego de golpear a su hermana porque no le gustaba su novio, el asesino se enredó en una disputa de varias horas con la policía. Al rendirse, le mandó una nota a un agente, firmada con la cruz y los sietes invertidos. No cabían dudas: se trataba del misterioso Zodíaco.

Luego, Seda dijo que había dejado de matar porque se dedicó a ver programas religiosos por televisión.

Durante su interrogatorio policial, pedía permiso para leer pasajes de la Biblia. Sin embargo, su conversión a la fe no lo hizo un hombre más sensible.

Durante el juicio, nunca mostró emoción, al punto que un jurado se preguntó si le habían dado sedantes.

Durante siete semanas, día tras día, me lo quedaba mirando en busca de algún signo de emoción en su rostro, para ver si se sentía mal por lo que había hecho, pero no encontré ninguno, dijo Mary Bella, que participó del jurado.

Seda todavía tiene que enfrentar otros juicios en Brooklyn y Manhattan. Pero por el veredicto de la corte de Queens puede ser condenado a 83 años de prisión o cadena perpetua.

Los jurados sólo tardaron cinco horas en encontrarlo culpable. Este hombre no pertenece a la sociedad, dijo Orozco, su primera víctima. Zodíaco lo había dejado tirado en la calle pensando que estaba muerto. Pero el hombre sobrevivió para ver el final de esta película de terror.


EL ZODIACO ANTIGUO.

No hay que confundir este caso de Seda con el viejo asesino Zodíaco que jamás pudo descubrirse quien era. Seda fue un mero imitador o "CopyCat".

El Asesino del Zodíaco fue un asesino en serie que actuó en California del Norte durante 10 meses desde finales de los años 60. Él mismo eligió su nombre en una serie de cartas amenazantes que envió a la prensa hasta 1974. En sus misivas incluyó cuatro criptogramas, de los cuales tres todavía no han sido descifrados.

El Zodíaco asesinó a cinco víctimas conocidas en Benicia, Vallejo, Lake Berryessa, y San Francisco entre diciembre de 1968 y octubre de 1969. Atacando a cuatro hombres y tres mujeres entre las edades de 16 y 29 años los cuales fueron los elegidos.

La identidad del asesino sigue siendo una incógnita (aunque se confeccionaron algunos identikit). Se piensa que mataba porque consideraba que la especie humana era el animal más dificil de asesinar y , según sus cartas enviadas: "Es un placer matar a la gente, es más, me divierte."

El autor explicaba que matar requería un gran esfuerzo, se trataba de "recoger esclavos," quienes le servirían en la vida futura.

Al respecto se ha filmado una película que lleva por nombre Zodíaco, y narra con detalles como fueron aquellos tiempos.

El Departamento de Policía de San Francisco declaró la investigación "inactiva" en abril de 2004 y reabrió el caso en marzo de 2007.